Partes de un currículum: el perfil profesional o elevator pitch adaptado.

Incluir el perfil en un currículum es un recurso relativamente nuevo. El currículum ha evolucionado y ahora es mucho más que poner simplemente la experiencia profesional y la formación. Si poner una buena cabecera es muy importante, también es fundamental explicar quiénes somos. Por eso es recomendable incluir el perfil profesional o  un elevator pitch adaptado. Todo con la finalidad de facilitar la lectura del currículum a la persona encargada de la selección de personal y que se haga una idea básica de quiénes somos y qué tenemos para ofrecer.

Adoptar y adaptar el Elevator Pitch en el perfil profesional.

conversación
Conversación de ascensor

La técnica del elevator pitch es conocida en el ámbito del coaching y de la orientación laboral. Está relacionada con la autocandidatura o la entrevista, principalmente cuando nos preguntan “hábleme brevemente sobre usted”. Es una manera de simular que subimos en un ascensor y tenemos ante nosotros a una persona interesada en contratar a alguien con nuestro perfil. En este breve trayecto tenemos que ser capaces de llamar su atención para que nos concierte una entrevista y podamos ampliar la información que pueda necesitar. Así pues, esta técnica también es útil para hacer más atractivo nuestro currículum y hacer que destaque por encima del resto. No se trata sólo de adoptar sino también de adaptar el elevator pitch para aprovechar el potencial de esta técnica de autopresentación.

El perfil profesional o  un elevator pitch adaptado debe explicar a qué nos dedicamos, siempre en relación con la oferta de empleo o con el puesto al que nos gustaría optar en caso de enviar una autocandidatura. En mi experiencia como orientador laboral, he visto que hay muchas formas distintas de enfocarlo y a veces un tanto erróneas. Se confunde a menudo con las competencias cuando realmente van en otro lugar y solo son una pequeña parte del discurso que debe aparecer en el perfil..

El perfil profesional debería tener la estructura básica de una carta de presentación pero en formato muy reducido. Debe aumentar interés por leer el currículum, teniendo en cuenta que a veces es una tarea un poco tediosa cuando se trata de muchas candidaturas. Es importante que destaque y facilite el trabajo de quien hace la selección.

Estructura del perfil profesional.

Perfil profesional
Perfil profesional

La primera parte es el titular: a qué nos dedicamos en relación con la oferta y el puesto. No se deben poner todas nuestras ocupaciones. Cada ocupación necesitará de una redacción y de un currículum distintos. A continuación, mencionar el tiempo de experiencia en el puesto. Luego, explicaremos brevemente las tareas que sabemos hacer o hemos desempeñado, relacionadas directamente con las tareas propias del puesto ofertado. Finalmente hay que incluir dos o tres competencias profesionales básicas, también ligadas con el puesto. 

En total el perfil debería tener entre 350 y 400 caracteres, aproximadamente. En el caso de que no tener experiencia en el puesto pero si formación, podemos hacer más hincapié en los conocimientos adquiridos y en las competencias. Lo importante es demostrar que somos la persona ideal para el puesto. Justamente después del perfil, ya podemos incluir la formación y la experiencia. 

Redactar un curriculum se complica cada día más. Ya no basta con mostrar los estudios y donde hemos trabajado. Teniendo en cuenta que estamos ofreciendo nuestros conocimientos y experiencia, hay que hacer que destaque por encima de los demás. A igual experiencia o formación hay que enseñar rasgos propios que marquen la diferencia.  Destacar es fundamental para llamar la atención de la persona seleccionadora y que tenga interés en llamarnos y concertar una entrevista para saber más. El currículum ha adoptado las técnicas del marketing y es nuestro escaparate. Tenemos que conseguir que lo lean, les guste, que entren en nuestro negocio y compren nuestro producto.